La piel es el órgano más grande del cuerpo, y cubre todas las partes externas del cuerpo. Protege el cuerpo de la invasión de bacterias y otros organismos que pueden causar enfermedades, y regula la temperatura corporal. La piel también es un importante órgano sensorial, ya que contiene receptores para la temperatura, el dolor y la presión.
La piel está compuesta de tres capas: la epidermis, la dermis y la hipodermis:
- La epidermis es la capa más externa de la piel, y está compuesta principalmente de células llamadas queratinocitos. Los queratinocitos son células que producen queratina, una proteína fibrosa que ayuda a proteger la piel de la deshidratación, la presión y otros daños.
- La dermis es la capa intermedia de la piel, y está compuesta principalmente de fibras de colágeno y elastina. El colágeno es una proteína que ayuda a dar forma a la piel, mientras que la elastina es una proteína que permite que la piel se estire y se recupere de la deformación.
- La hipodermis es la capa más interna de la piel, y está compuesta principalmente de tejido adiposo, que sirve como aislante térmico y almacén de energía.
Alimentos que debes comer para tener piel sana
Tomates
Los tomates son una fuente excelente de vitamina C, un potente antioxidante que protege la piel de los daños causados por los radicales libres. Además, la vitamina C es necesaria para la producción de colágeno, una proteína que mantiene la piel firme y elástica.
Café
El café contiene cafeína, una sustancia estimulante que tiene efectos beneficiosos para la piel. En concreto, la cafeína protege la piel de los daños causados por el sol, mejora la circulación y reduce la inflamación.
Aguacate
Los aguacates son ricos en vitamina E, una sustancia que protege la piel de los daños causados por los radicales libres. La vitamina E también mejora la elasticidad de la piel y la protege contra el envejecimiento prematuro.
Nueces
Las nueces son una buena fuente de selenio, un mineral que protege la piel de los daños causados por el sol. Además, el selenio también tiene un efecto beneficioso sobre el acné, ya que ayuda a reducir la inflamación.
Salmón
El salmón es un pescado rico en ácidos grasos omega-3, que tienen un efecto beneficioso sobre la piel. En concreto, los ácidos grasos omega-3 protegen la piel de los daños causados por el sol, mejoran la elasticidad y reducen la inflamación.
Té verde
El té verde contiene catequinas, unos compuestos antioxidantes que protegen la piel de los daños causados por los radicales libres. Las catequinas combaten la inflamación, por lo que es auxiliar en el tratamiento del acné.
Chocolate
Los flavonoides son un tipo de antioxidantes presentes en el chocolate. Son compuestos que permiten proteger contra los radicales libres y eliminarlos. Son excelentes para disminuir el riesgo de cáncer.
Limón
El limón es una fuente excelente de vitamina C, un potente antioxidante que protege la piel de los daños causados por los radicales libres. Además, la vitamina C es necesaria para la producción de colágeno, una proteína que mantiene la piel firme y elástica.
