Perú está calificado como el mayor productor de papas en América Latina. Por este motivo, resulta extraño que sea uno de los productos menos exportados. De hecho, la papa peruana también es poco consumida y constantemente sustituida por la papa importada. Esto resulta difícil de comprender, pero es una realidad.
En restaurantes y empresas de catering de Perú suelen recurrir a la papa importada para la elaboración de muchas de sus degustaciones, especialmente cuando se trata de papas ya procesadas, listas para freír o para ser sometidas a otra técnica de cocción.
¿Por qué el desplazamiento a la papa peruana?
En años recientes, esta situación se volvió un estado de alerta para los productores de papas a escala nacional. Para 2020, alrededor de 60% de los establecimientos de comida o catering del Perú recurrían al uso de papas “pre-fritas”. Este enser ha venido procedente de países como Argentina, Bélgica, Estados Unidos y Holanda.
Este patrón, que no resulta alentador, solo tiene una explicación lógica. Al venir procesadas, listas para la cocción, se ahorra tiempo en materia de producción, especialmente en los restaurantes. El uso de papas importadas en lugar de papas peruanas trasciende más allá de las clásicas franquicias internacionales que conoces. Toda esta serie de circunstancias han desatado un panorama preocupante.
Otra de las razones por la cual se cree que las papas peruanas están siendo desplazadas por las papas importadas es la falta de “valor agregado”. Esto quiere decir que se necesita de la maquinaria más apropiada para preparar las papas para su venta y consumo. De esta manera, los productores nacionales podrían tener la capacidad de ofrecer una cosecha de mayor calidad.
Aunado a ello, las papas peruanas no cuentan con presentaciones procesadas que aporten un incremento significativo a su venta. El consumo de papa peruana podría competir con la papa importada si tuviera presentaciones en forma de snacks, cajas, envases portables, entre otras.
¿Qué hace destacar a la papa peruana?
Las papas peruanas tienen características que la distinguen de las papas importadas, un ejemplo de ello es su corte o forma. Las papas peruanas vienen en diferentes proporciones, mientras que las importadas vienen con un corte perfectamente simétrico, todas presentan las mismas medidas y olores similares.
La textura también presenta diferencias notorias. Al principio, ambas papas tienen una textura dura, y al cocinar, esta cambia. Sin embargo, al enfriar, las papas importadas se tornan más blandas con el frío, mientras que las peruanas mantienen su dureza. Por otra parte, las papas peruanas tienen un sabor más potente.
¿Por qué apostar por la papa peruana?
Implementar la papa peruana, bien sea en el hogar, en restaurantes o en empresas de catering, tiene beneficios en la salud y en el aspecto económico.
La papa peruana es un alimento bajo en calorías. Es rica en nutrientes como las vitaminas C y B6. También posee minerales como el hierro, el magnesio, el magnesio y el potasio. Todos estos componentes contribuyen a la prevención de padecimientos degenerativos, así como también del cáncer.
Desde el punto de vista económico, a diferencia de las papas importadas, las papas peruanas se pueden encontrar a precios sumamente bajos en los supermercados, lo que supone un ahorro importante para tu bolsillo.