Recomiendan el consumo de líquidos y sales rehidratantes en casos de pacientes COVID-19
El COVID-19 es una enfermedad que puede afectar varios órganos como el pulmón, corazón o riñones, por eso es importante el consumo de líquidos, entre ellos el agua pura, sales hidratantes, infusiones, caldos, y bebidas isotónicas o deportivas, entre otros. La doctora Doris La Chira, neumóloga de Sisol Salud, señala que la hidratación es fundamental para el tratamiento y la recuperación de pacientes con coronavirus, ya que compensará la pérdida de líquidos y minerales debido a los síntomas de la enfermedad.
“Cuando se presentan cuadros diarreicos, fiebre y sudoración, el paciente elimina líquidos y electrolitos, como el sodio, potasio y otros, y si no hay una buena hidratación, se podría originar una descompensación, un paro cardiaco y otros problemas graves. Por eso hay que tener en cuenta los signos de alarma, como sed excesiva, boca y lengua seca, micción menos frecuente, orina de color oscuro, fatiga y mareos, para actuar de inmediato”, explicó la especialista.
El consumo de líquidos debe ir acompañado de una alimentación saludable y rica en proteínas.
Si una persona debe consumir dos litros de agua al día, el paciente con coronavirus debe incrementar esa cantidad para una recuperación progresiva. Pedro Tirado, nutricionista de Sisol Salud, recomienda el consumo de agua tibia o infusiones de plantas medicinales: “Puede ser el eucalipto, la cola de caballo, la ortiga o la muña, que tienen un efecto antiinflamatorio en el organismo y limpian el hígado y los riñones de las toxinas. Por otro lado, las aguas de kión, ajos y cebolla ayudarán a eliminar la mucosidad que hay en los pulmones por sus propiedades expectorantes”, comenta.
En el caso de las verduras se recomienda consumirlas en extractos tres veces al día (en ayunas, y antes del almuerzo y la cena), se puede elegir entre el pimentón, la zanahoria, el yantén y la beterraga; mientras que para las frutas son mejores las que tienen mayor cantidad de agua como la naranja, mandarina, melón y piña. Estas deben consumirse dos horas después de las comidas.